La integración del diseño y la simulación de procesos químicos es una práctica ingenieril que tiene en cuenta todos los aspectos de la ingeniería química, combinando aplicaciones teóricas y del mundo real. Contamos con programas avanzados de ingeniería química, y las simulaciones nos permiten modelar cómo se comportan diferentes reacciones y procesos con respecto al tiempo, y estos datos cuantitativos pueden luego utilizarse como bloques de construcción para técnicas de optimización. Esto no solo mejora la eficacia general de las prácticas actuales, sino que también permite la creación de nuevos sistemas y procesos que cumplen con los estándares establecidos. La búsqueda de soluciones sostenibles y las prácticas de orientación en seguridad también controlan el daño mientras se alcanza la calidad y cantidad deseadas.